El video y la cámara fotográfica. La fotografía subacuática fue realizada desde el momento en que el submarinismo tomó un verdadero auge. En un principio los propios interesados se las ingeniaban para proteger su equipo de fotografía bajo el agua. Habría que esperar a 1943 para que apareciera el Aqua Lung, que suponía una mejora a la opción inventada en 1937 consistente en el empleo de la junta tórica (que crea un espacio estanco) aplicada a la protección de la cámara. La generalización del buceo por aficionados impulsó el desarrollo de equipos de fotografía y filmación. El mundo del cine también tenía algo que decir y Hans Hass fue el primero en rodar una película, de género documental, bajo el agua en 1939, Stalking Underwater. Jacques Cousteau, recibió un oscar en 1956 por su primera película documental titulada The Silent World. Las cámaras fueron evolucionando y adaptándose a las necesidades que el medio precisaba, así aparecieron las primeras cámaras anfibias Nikonos, uno de cuyos modelos, la Nikonos V, se ha considerado como una de las mejores cámaras subacuáticas. El video también ha evolucionado con la técnica y la imagen digital ha lanzado al mercado cámaras pequeñas, de fácil adaptación a la luz y cuyas posibilidades de mejora, una vez realizadas, es fantástica.

De entre todos los modelos existentes tenemos que distinguir entre las cámaras anfibias, que no precisan de ninguna carcasa especial para sumergirlas y las cámaras que se introducen dentro de cajas impermeables. Las cámaras pueden ser digitales o analógicas, las denominadas como SLR (de un solo objetivo) también tienen estas dos versiones y con un número amplio de objetivos que permiten diversas posibilidades lo que las hace las más usadas por fotógrafos profesionales. Estas cámaras y las compactas necesitan de una carcasa que las proteja del agua y el material en el que están fabricadas es de plástico o de aluminio (para las SLR). Depende del uso que le demos elegiremos una u otra opción. Otro factor importante es la iluminación y puesto que las cámaras digitales son muy limitadas en esta área, se necesita de un flash auxiliar o estroboscopio que se acopla a la cámara. La orientación que se le de a esta luz determinará el grado de luminosidad de la instantánea. Las cámaras de video también han sufrido un alto grado de desarrollo en los últimos tiempos y podemos grabar en versión digital o en cintas. Existen cámaras denominadas 3CCD que dividen la información del color rojo, verde y azul, permitiendo obtener una gran riqueza cromática. Las cámaras de alta definición o HD, producen imágenes de una gran calidad. En todos estos casos es primordial el uso de una carcasa fuerte que proteja la cámara así como un sistema de iluminación que facilite y mejore la toma de color. Las carcasas pueden ser electrónicas o manuales. En estas últimas un sistema de pistones, varillas, clavijas y lengüetas permiten manejar los distintos dispositivos de la cámara. De estas notas deducimos que, a veces, no depende de los elementos que llevemos consigo, sino de la utilidad que queramos hacer con ellos y de cómo estos vayan dispuestos en nuestro equipo para que sean realmente eficaces.