La ciudad de Ammán está coronada por la Ciudadela, se encuentra en lo alto de una de las numerosas colinas por donde se hallan importantes lugares de interés; el Palacio Omeya que data del siglo XII D.C. Y el cual ha sido restaurado recientemente; las ruinas del Templo de Hércules construido por un conjunto de columnas de estilo románico que además contiene escrituras griegas y latinas, citados desde el siglo XVI en sus distintos dinteles; el Museo Arqueológico Nacional que muestra una gran colección de piezas de la prehistoria jordana, entre los cuales se destaca la colección de rollos del Mar muerto; y la Iglesia Bizantina.
La colina en la cual se encuentra ubicada tiene una forma parecida a la letra: L, siendo uno de los sitios antiguos que aún permanecen habitados ya que se estima su antigüedad hasta hace aproximadamente unos 7 mil años.
Durante la visita uno puede encontrar la presencia de los distintos imperios que la han ocupado empezando por el imperio asirio para posteriormente ser conquistada por Babilonia, los Ptolomeos, los seléucidas, el imperio romano y los Omeyas. Todas estas culturas dejaron huella en Amán y de todas ellas podemos ver rastros en la Ciudadela. Siendo además testigo del surgimiento de las tres grandes religiones monoteístas de la humanidad: judaísmo, cristianismo e islam. La Mezquita Omeya se encuentra ubicada dentro de la ciudadela, lo cual se atribuye a la continua ocupación de la zona durante muchos siglos de las tres religiones monoteístas.
Ahora la Ciudadela está rodeada por las murallas en las cuales se pueden encontrar varios vestigios de una primera muralla la cual se remonta al final de la Edad de Hierro para proteger la ciudad de las invasiones.
En la Ciudadela de Ammán se encuentran restos de una primera muralla que se remonta al final de la Edad de Hierro, levantada para proteger esta ciudad de las invasiones. En la época de los romanos, y más tarde, durante la ocupación de los omeyas, la muralla se amplió hasta tener un largo de poco más de kilómetro y medio de longitud.
Finalmente, la muralla de la Ciudadela quedó casi completamente destruida tras un fuerte terremoto en el año 749 D.C.
Dentro de la ciudadela podemos encontrar el Museo arqueológico de Jordania, el cual contiene una colección de estos objetos, junto con los de otros lugares históricos de Jordania.
Desde la ciudadela se pueden observar una fantástica panorámica de la ciudad de Amman y sus cerros cubiertos de casas, sin duda una gran experiencia sin igual.