En Bali existen unos extensos campos de arroz que se pueden encontrar en la isla, los cuales llenan de hermosura el paisaje, el cual es un lugar idóneo para contemplar la isla.
El terreno que existe en la isla como el suelo de la tierra que es de tipo volcánico, el clima cálido y el agua abundante son tres factores que han permitido que haya muchos arrozales en la isla. Prácticamente, el cultivo de arroz representa la economía de la isla además de su principal fuente de ingresos junto al turismo. El interés del turismo por esta actividad de la isla cada vez es mayor, de hecho, los lugareños ofrecen todo tipo de excursiones y tours por los cultivos a los viajeros.
Estos terrenos cuentan con una estructura montañosa lo cual provoca que el cultivo del arroz no sea una tarea fácil, pero debido a que el arroz es una fuente indispensable de alimento, los campesinos balineses han ideado hacer los campos de arroz de forma escalonada. Algunos de los escalones o niveles tardaron en construirse por varios siglos, aunque actualmente forman parte del paisaje verde que es digno de una típica postal asiática.
Estos campos son regados a través de un sistema de canales que llegan a transportar el agua desde los manantiales hasta los campos de arroz para mantenerlos húmedos y, después de 210 días, el arroz está completamente listo para ser recolectado. Después de esta recolección el terreno nuevamente se prepara para realizar la próxima plantación. Todo el proceso según el pensamiento de los lugareños es supuestamente vigilado por Dewi Sri, diosa del arroz, a la que los campesinos llegan a ofrecer un homenaje importante con los pequeños santuarios que llegan a colocar en las plantaciones.