Berlín es una ciudad llena de historia, arte, cultura e increíble comida. Con tanto que hacer en la capital alemana, puede ser difícil saber por dónde comenzar.

Galería del Lado Este:

La galería East Side en Friedrichshain-Kreuzberg es un tramo de 1,3 km del muro de Berlín que fue pintado por primera vez en 1990.

El arte callejero en Berlín se limitaba anteriormente a murales de pared que los visitantes sólo podían ver en el lado oeste del muro, pero los artistas locales se encargaron de transformar este tramo en la icónica galería al aire libre que vemos hoy en día.

East Side Gallery muestra la creatividad de los berlineses que transformaron un feo símbolo de división en algo bello y unificador.

Visitar el memorial a las víctimas del muro de Berlín:

Durante la época de la división de Berlín, las estaciones que cruzaban la frontera se volvieron obsoletas y, por lo tanto, se convirtieron en unos callejones sin salida. Sin embargo, tres líneas viajaban desde Berlín Occidental a través de tramos cortos del territorio de Berlín Oriental. Los trenes nunca pararon en estas estaciones que se conocieron como "Geisterbahnhöfe" o estaciones fantasma.

Nordbahnhof fue una de estas "estaciones fantasma" y ahora acoge una exposición fotográfica dedicada a la conmemoración de las estaciones desiertas. Conmovedoras historias sobre la seguridad fronteriza tanto en la superficie como en el subsuelo y sobre los planes de escape, la exposición dura unos 30 minutos.

Una vez que haya tomado todo el contenido subterráneo que pueda, tome la salida de la Bernauer Strasse y camine hacia el este en dirección al Wall Memorial. Aquí encontrará una gran cantidad de información y reconstrucciones que incluyen franjas fronterizas, una torre de vigilancia y la Capilla de la Reconciliación que se encuentra en el sitio de una antigua iglesia volada por las autoridades de la RDA.

Visitar La puerta de Brandemburgo:

Si usted está en el camino de los monumentos emblemáticos de Berlín, la Puerta de Brandemburgo no es un mal lugar para empezar. El telón de fondo de muchos acontecimientos históricos, hoy en día se considera un símbolo de la paz y la unidad europea.

Antiguo símbolo de la ciudad dividida, atrajo a visitantes que subían a una plataforma de observación para ver el mundo detrás del Telón de Acero, al otro lado de la árida "franja de la muerte" que separaba geográfica y políticamente Berlín Este de Berlín Oeste. Fue aquí donde el 12 de junio de 1987, Ronald Regan emitió su severa orden a su adversario de la guerra fría amonestándole con las palabras: "¡Sr. Gorbachov, derribe este muro!". El discurso pronunciado ante los berlineses occidentales también se escuchó en el lado este de la Puerta y se hizo eco de las palabras del Presidente von Weizsacker, que se traducen como: "La cuestión alemana está abierta mientras la Puerta de Brandemburgo esté cerrada."

La Puerta de Brandemburgo se ha convertido en un símbolo de unidad

Cuando Alemania se reunificó tras la caída de Berlín en noviembre de 1989, la Puerta de Brandemburgo se reinventó rápidamente en el símbolo de unidad de la Nueva Berlín. Se abrió oficialmente al tráfico el 22 de diciembre de 1989 y 100.000 personas acudieron para celebrar la ocasión. Desafortunadamente, esto también causó graves daños al monumento, que debía ser restaurado y que no fue reabierto oficialmente hasta el 3 de octubre de 2002.

Visitar la antigua sede de la SS y la Gestapo:

Para las personas que viajen con niños, es importante que tengan cuidado, ya que en el tramo del muro original que queda fuera del Centro de Documentación de Topografía del Terror no es más que un precursor de los horrores documentados en esta exposición permanente gratuita.

Como su nombre lo indica, este no es un caso para los pusilánimes. Situado en el lugar donde se encontraba el antiguo cuartel general de las SS y la Gestapo, a través de una atractiva y educativa mezcla de fotografías, vídeos y documentos, los visitantes son guiados a través de la toma del poder por parte de los nazis y su implacable persecución hacia los judíos.

Visitar los palacios de Potsdam y caminar a través de los lagos:

¿Quiere escapar de la ciudad por un día? Diríjase a Potsdam, la ciudad fronteriza de Berlín, y a sólo una hora en tren.

Una vez en casa de los reyes prusianos y del Kaiser alemán, en la mayor atracción de Potsdam, el Parque de Sanssouci, descubrirá impresionantes palacios que se asoman desde la vegetación.

Además de estos impresionantes edificios, Potsdam marca el punto de partida y de llegada de una ruta de 400 km que une todos los lagos de los alrededores de Berlín. Atravesando pueblos unicos, densos bosques, orillas cubiertas de hierba, brezales pantanosos y arroyos asombrantes, cada sección del sendero dura entre 6 y 7 horas.

Maravíllese con la arquitectura de la Isla de los Museos

En la punta de la Isla Spree, la Isla de los Museos es un complejo de cinco museos - Pergamonmuseum, Bodemuseum, Neues Museum, Alte Nationalgalerie y Altes Museum - que colectivamente gozan del estatus de Patrimonio Mundial de la Unesco. Aunque será necesario pagar la entrada para ver los objetos que hay en sus interiores, pasear por la isla para admirar la magnífica arquitectura sin duda que no costará nada.

Visitar la columna de la victoria (Siegessäule):

La historia de Siegessäule comienza con una gran victoria militar durante el siglo XIX. T Siegessäule fue diseñado por Heinrich Strack en 1864 como una celebración de la victoria prusiana en la guerra entre Dinamarca y Prusia. El diseño original de Siegessäule estaba en una sola columna, sin la estatua en la parte superior que se puede ver hoy en día.

Visitar la Torre de television de berlin:

Con 368 metros de altura, la Torre de Televisión de Berlín atrae a 1,2 millones de visitantes al año, por lo que puede ser un punto de interés muy atractivo. Es posible comprar un boleto en el día, pero usted podría terminar haciendo fila por más de una hora, sólo para que le den un espacio hasta cinco horas más tarde (usted puede irse y regresar). En su lugar, reserve su boleto en línea y evite las multitudes. No es de extrañar que el momento más tranquilo sea la hora final, entre las 23:00 y la medianoche. Si no se marea demasiado después de alcanzar la cima de los 368 metros, disfrutará de una espectacular vista de toda la ciudad.

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