Dyrehavsbakken (La colina del parque de los ciervos), comúnmente conocido como Bakken, es un parque de atracciones cerca de Klampenborg, a unos 10 km al norte de Copenhague en Dinamarca, y es el parque de atracciones más antiguo del mundo.
Fundada en 1583, fue el lugar favorito de los habitantes de Copenhague durante siglos. La gente de Copenhague se sintió atraída por el manantial debido a la mala calidad del agua en el centro de Copenhague durante este período. Estas grandes multitudes atrajeron a los artistas, cuya presencia evolucionó hasta convertirse en algo así como los parques de diversiones, como se los conoce actualmente.
Según la historia, la zona en la que se ubicaba el manantial era un coto de caza real. El rey Federico III decidió crear un parque de animales en la zona, y más tarde su hijo Christian V lo amplió en 1670. El lugar se convirtió en una atracción gracias al manantial de agua dulce que se encuentra en el terreno. Bakken era un lugar de reunión para aquellos que buscaban agua limpia y hermosos paisajes. Luego, en 1669, el rey Federico III cerró el terreno al público y comenzó a utilizarlo como coto de caza real privado. El parque no fue abierto al público hasta 1756.
Después de la reapertura, los artistas, vendedores y paseos comenzaron a abrirse camino hacia el parque, creando el Bakken que conocemos hoy en día. El moderno parque de atracciones de Bakken es maravilloso, pero más allá del parque es donde se encuentra la verdadera emoción. Los antiguos cotos de caza reales están todavía llenos de ciervos salvajes, hermosos árboles y algunas de las únicas colinas de Dinamarca.
Precio de la entrada:
Niño: gratuito, adulto: gratuito
Billete multiusos:
270 coronas suecas.