Del arte precolombino cubano existen muy pocos testimonios, si bien se sabe que desde hace 4.000 años habitaban ya algunos grupos humanos. Se han encontrado restos de construcciones destinadas a juegos y ceremonias, así como vasijas de cerámica muy simples y rudimentarias. En Cuba se celebran acontecimientos culturales de reconocido prestigio en los que participan primeras figuras de la danza, el teatro, la guitarra entre otras manifestaciones artísticas. Destaca el Certamen Literario de la Casa de las Américas y los festivales internacionales de Ballet y del Nuevo Cine Latinoamericano.
Arquitectura
En los años de la conquista y de la colonia española, gracias a su estratégica ubicación, Cuba se convirtió en un objetivo deseado por los corsarios y piratas, por lo que la arquitectura de aquella época se centró en la construcción de fortificaciones de las que aún quedan exponentes como el Castillo de los Tres Reyes del Morro.
Las siete primeras ciudades fundadas a partir de 1512 fueron: Baracoa, Bayamo, Santiago de Cuba, Trinidad, Sancti Spiritus, Camagüey y La Habana. A pesar de que La Habana funcionaba como la residencia del gobernador desde tiempos anteriores, fue en el año de 1607 cuando, por Real Decreto, se convirtió en capital. La ciudad vieja, en torno a la Plaza de Armas, conserva sus características de la época colonial y se desarrolló urbanísticamente de acuerdo al trazado regular en damero. Sus bellos palacios barrocos y sus iglesias, guardan la historia de aquellos tiempos. Declarada por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad, La Habana sobresale de entre muchas ciudades coloniales de América Latina. Destacan la Catedral de estilo barroco “cubano” -es decir, más sobrio- o el Palacio del Marques de Aguas Claras, considerado como uno de los más bellos ejemplos de la arquitectura colonial.
Puede decirse que el arte tuvo un desarrollo tardío, provocado sobre todo, por la falta de mano de obra indígena y por la ausencia de buenos materiales, a excepción de las maderas nobles, con las que se realizaron, en base a diseños de influencia mudéjar, balcones, rejas, balaustradas, celosías de ventanas, etc. Entre las construcciones más representativas con este tipo de ornamentación destacan la del Convento de Santa Clara, que se construyó entre 1638 y 1644. De las que se conocen como “sin ornamento”sobresalen las iglesias de San Francisco de Paula y la Iglesia de San Francisco.
Durante el siglo XIX en Cuba se desarrollan importantes obras de calidad, especialmente la construcción de numerosos palacetes. En el siglo XX se construyen obras que destacan mayormente por su eclectisismo. Un ejemplo es el conjunto de Escuelas de Arte de La Habana o el Conjunto Residencial de Manicaragua, en los edificios que forman la Ciudad Universitaria.
Pintura
En cuanto a las artes plásticas las obras más importantes provienen de los siglos XIX y XX, especialmente las producidas con la fundación de la Asociación de Pintores y Escultores, donde la tendencia dominante era la exaltación de la línea y el color. Entre los numerosos pintores cubanos destacan las obras de Lam, Portocarrero, Mariano, Víctor Manuel, Amelia Peláez, Marcelo Pogolotti y Manuel Mendive, entre otros.
Teatro
Puede decirse que las artes escénicas cubanas tienen su inicio con la representación de obras líricas, en clara ventaja sobre las clásicas. Diversos teatros se construyeron en la primera mitad del siglo XIX: en el año de 1822 se construye el Coliseo en Santiago de Cuba y en 1837 el Tacón en La Habana, actual Teatro Nacional García Lorca En ellos se han representado zarzuela, opera, teatro bufo -género de origen francés, en donde la ironía y el juego de palabras, constituyen el eje central-, así como diversas obras de otra índole. Entre los autores del XIX, el precursor es Francisco Covarrubias, creador de sainetes.
En el siglo XX se va desarrollando un teatro criollo en el que se representan temas locales, en este contexto se desarrolla el teatro bufo. Por su parte los Patronatos Teatrales fomentaban la proliferación de actores. La Revolución impulsó el teatro y durante los años 60 se creó el Teatro Estudio, que llevó a los escenarios importantes obras. En los 70 es el triunfo del teatro social, destaca el grupo Teatro Escambray. Entre los autores cubanos, Virgilio Piñera es uno de los más reconocidos, junto a Carlos Felipe y los más modernos Héctor Quintero y Abelardo Estorino.
Con la Revolución se desarrollaron todas las artes, incluida el ballet, a partir del sistema “Escuelas de Arte”. Es necesario destacar el famoso Ballet Nacional de Cuba dirigido por Alicia Alonso.
Literatura
En cuanto a la literatura, la figura más relevante y de mayor influencia ha sido en sus comienzos José Martí, quien creía en el futuro de una sociedad multirracial y proponía el mestizaje entre la lengua y la tradición españolas con las tradiciones americanas. Además de su participación en diversos momentos en la historia política de Cuba, Martí escribió numerosos ensayos, diversos artículos de política e historia, así como críticas literarias. Sin embargo, su obra de más prestigio son los “Versos Sencillos”, publicados después de su muerte en el año de 1913. También destaca el santiaguero José María Heredia y Gertrudis Gómez de Avellaneda, sin olvidarnos de Cirilo Villaverde, autor de “Cecilia Valdés”.
Quién plasmó como nadie en sus versos la cultura afrocubana fue el genial Nicolás Guillén. Se dice que Alejo Carpentier fue un precursor del “Realismo Mágico” y entre sus mejores obras destacan “El Siglo de las Luces” y “El Reino de este Mundo”. Es necesario destacar a poetas como Dulce María Loinaz, Lezama Lima y Carilda Oliver. Se distinguen además escritores como Rubén Martínez Villena, Cintio Vitier, Eliseo Diego y Roberto Fernández Retamar. Durante el período revolucionario surgen celebres escritores como son jorge Soler Puig, Miguel Barnet, Lisandro Oero, Manuel Cofiño y Senel Paz.
Cine
Hasta la llegada de la Revolución, el cine que se ve en la isla es, sobre todo, de procedencia extranjera. En la década de los años 50 comienzan a aparecer nombre como García Espinosa y Gutiérrez Alea, un cineasta que hasta su fallecimiento hace unos años ha dado al cine obras sumamente interesantes, desde películas como “Memorias del Subdesarrollo”, “Siete muertos a plazo fijo” o “El Burócrata”, hasta otras que trascendieron las fronteras como “Fresa y Chocolate”.
En los años 60 el Instituto Cubano del Arte y la Industria Cinematográfica impulsa la aparición de nuevos talentos como Santiago Álvarez, Humberto Solás o Manuel Octavio Gómez. De los contemporáneos citamos a Octavio Cortázar, Jorge Fraga, Enrique Pineda, Juan Padrón (especialista en animación), y Fernando Pérez Valdés director y escritor con películas como “Clandestinos”, “Hello Hemingway”, “Madagascar” y “La Vida es Silbar”.
Música
En cuanto a las expresiones musicales Cuba ha sido un importante centro generador de diversas tendencias musicales. En la isla se ejecutan ritmos que tienen su base en la música de origen criollo -y que después sería adaptada y modificada por los esclavos negros, procedentes de África-, por lo que el resultado es una explosión de ritmos muy variados. Destacan la habanera, el danzón, la sandunguita -la sandunga es una danza popular mexicana originaria de Chiapas y típica de la región de Tehuantepec y Oaxaca-, la samba, de origen brasileño, la conga, ejecutada por grupos colocados en fila doble y al compás de un tambor, el “cha cha cha”, que se deriva de la combinación de determinados ritmos de rumba y mambo y, finalmente, la rumba, de origen africano, el ritmo más popular en la isla. Sus orígenes se remontan al siglo XIX y según algunas teorías, nace al mezclarse con los ritmos de la habanera, mucho más antigua que ésta. Para su ejecución se utilizan instrumentos de percusión.
Con el triunfo de la Revolución se inicia un fuerte movimiento musical conocido como la “Nueva Trova Cubana” con temas comprometidos y de un alto contenido político y social. Destacan Pablo Milanés y Silvio Rodríguez.
El “feeling” surgió en Cayo Hueso, popular barrio habanero, se dice que es un “sentimiento bolerizado”, sus principales representantes son Cesar Portillo, Omara Portuondo, José Antonio Méndez y Elena Burke.
Lo que fuera de Cuba se conoce como salsa, no viene sino del son cubano. Nació en el Oriente a finales del siglo XIX y se fue extendiendo por toda la isla y en los últimos años por parte del mundo. Entre los grandes soneros se encuentran Ignacio Piñeiro (la figura más importante del son cubano y que el Septeto Nacional lleva su nombre), Benny Moré, Generoso Jiménez, El Guayabero, Omara Portuondo, Juan Formell, Lázaro Herrera, Celeste Mendoza, Pancho Amat y el exitoso Compay Segundo, entre otros muchos.
En la casa, en la calle, en la playa, cualquier lugar es bueno para improvisar una fiesta donde el baile y la música no pueden faltar. La Habana está llena de lugares para bailar o escuchar “son”, algunos son turísticos, pero otros como el Salón Rojo, son de ambiente muy cubano. Entre los instrumentos más utilizados para tocar “son” están la tumbadora -conga-, el tres, la guitarra, trompeta, maracas y claves, principalmente.
Actividades Culturales en Cuba Las actividades culturales también son a tener en cuenta a la hora del entretenimiento en la isla. El teatro y la danza, junto con la música son muy ricos en Cuba. Los numerosos festivales que se celebran en distintas fechas son dignos de tener en cuenta si quiere conocer la cultura cubana. No olvidemos que se puede ir a la isla a participar en seminarios y a recibir cursos sobre numerosas materias. Son interesantes los cursos de cine, de fotografía submarina, teatro y que decir de la música y la danza.