La población de Ecuador se estima en alrededor de 12.000.000 de habitantes. La densidad de población es una de las más altas de América Latina al tener cerca de 42 personas por kilómetro cuadrado. Cerca del 40% del total de la población es indígena, mientras que otra cantidad igual son mestizos. El resto se distribuye entre blancos y personas de raza negra que habitan, sobre todo, en el norte del país. La mayoría de los indígenas hablan quechua, habitando, principalmente en las tierras altas de los Andes.
Aproximadamente el 48% de los ecuatorianos vive en la costa y las islas, un 46 por ciento en las tierras altas, el resto en la región selvática de oriente. La mayoría de la población es urbana (55%), es decir, habita en poblados y ciudades, mientras que el 45% restante, en su mayoría indígena, vive en el campo.
Si algo caracteriza a los Ecuatorianos es su hospitalidad, su buen sentido del humor y su especial acento al hablar. Los habitantes serranos, indígenas y campesinos, se distinguen por la conservación de sus ancestrales tradiciones, por comunicarse en quechua y por su especial cosmovisión de la existencia. Aman profundamente la tierra, se saben parte de ella y por eso realizan continuamente ofrendas, para honrar su origen, a las fuerzas de la naturaleza y a los dioses. Cuando se va iniciar la siembra, ofrecen hojas de coca, pisco o cerveza a la Pacha Mama, la Madre Tierra. Y antes de beber cualquier cosa, arrojan un poco a la tierra, para agradecer la posibilidad de calmar su sed.
La mayoría de los quechuas viven en las tierras altas, los quechuas de cada región se visten de manera diferente y la evolución de la lengua también presenta variaciones. La mayor población de estos indios vive en Chimborazo, mientras que pequeños grupos habitan en las tierras bajas amazónicas, junto con shuares, huaorains, cofanes y siona-secoyas. Cerca de la costa viven indios cachi, al norte de la provincia de Esmeralda, y tchatchilas cerca de Santo Domingo de los Colorados en las tierras bajas del oeste. Todos estos grupos tienen su propia lengua.