Guadalupe es uno de los centros de artesanía más importantes de Extremadura, donde se pueden adquirir trabajos de calderería y orfebrería, cerámicas y los famosos bordados y encajes, y cestería en mimbre. En la Plaza Mayor de Guadalupe y en las calles que rodean al Monasterio están instaladas numerosas tiendas especializadas en artesanía regional. Otra de las buenas compras que se pueden realizar en la localidad son sus productos gastronómicos, y en concreto los dulces. Entre ellos destacan el muégado, una masa frita que se enriquece con miel, las rosquillas de yema, el pudin de castaña y los almendrados.