De los platos típicos de que pueden degustar en esta localidad destaca el gazpacho jumillano y el cordero lechal. Otras delicias gastronómicas locales son las gachasmigas, el trigoentero y el mortirigüelo, siempre acompañadas por el vino de Jumilla, caracterizado por su sabor suave y afrutado. Entre los postres hay que destacar los roscos de vino y las cristóbalas en Navidad. También hay que mencionar los vinos de la localidad que poseen Denominación de Origen. Se elaboran a partir de uvas monastrell, garnacha o cencíbel. Estos vinos suelen ser aromáticos.