En Kansas se hallan la mayoría de las praderas vírgenes de EEUU, donde la flora se compone de flores indígenas y salvajes tan peculiares como el falso azul indigo. El oeste del estado es una llanura de inmensos trigales, que le han dado a Kansas los sobrenombres de “Estado del Trigo” y “País de la Granja”. Y en estos campos de oro crece la flor oficial de Kansas: el girasol. El noreste del estado es una zona de colinas verdes con bosques y lagos, donde se encuentra la mayor parte de las especies que componen su fauna: buffalos, antílopes, coyotes, ciervos de rabo blanco, pavos salvajes, ocas de Canada, pelícanos, grullas, halcones de rabo rojo, águilas calvas, zorros rojos, castores y no faltan tampoco los famosos pollos de la pradera. En las tierras húmedas habitan patos, enormes grullas y tejones, entre otras especies. Pero el animal más abundante en Kansas es la codorniz a la que incluso se le ha dedicado un valle en Moundridge.