Priene Estaba situado debajo de la masa de la montaña Samsun (anteriormente Mikale) en la costa antes de que el río Maeander obstruyera el puerto. Ahora el mar está a quince kilómetros y las llanuras circundantes se han convertido en inmensas plantaciones de algodón. La ciudad se rebeló contra el dominio persa bajo el rey Ciro y, en venganza, los persas la arrasaron. La ciudad recuperó su prosperidad bajo el emperador Augusto a pesar de tener una población de solo siete mil. Durante el reinado bizantino se convirtió en obispado. Priene se convirtió en parte del Imperio Otomano en el siglo XIV. Las calles de Priene tienen la particularidad de que son todas horizontales y verticales, paralelas y perpendiculares, como un tablero de ajedrez. Sin embargo, los zapatos cómodos son imprescindibles, especialmente para aquellos que desean llegar a la cima donde alguna vez estuvo la Acrópolis. Ahora solo quedan ruinas, pero la vista es espectacular y vale la pena el esfuerzo. Por otro lado, el Teatro aún se encuentra en buen estado aunque parcialmente sumergido en árboles y vegetación. El teatro era originalmente griego y construido en el siglo IV a.C. ...Priene Estaba situado debajo de la masa de la montaña Samsun (anteriormente Mikale) en la costa antes de que el río Maeander obstruyera el puerto. Ahora el mar está a quince kilómetros y las llanuras circundantes se han convertido en inmensas plantaciones de algodón. La ciudad se rebeló contra el dominio persa bajo el rey Ciro y, en venganza, los persas la arrasaron. La ciudad recuperó su prosperidad bajo el emperador Augusto a pesar de tener una población de solo siete mil. Durante el reinado bizantino se convirtió en obispado. Priene se convirtió en parte del Imperio Otomano en el siglo XIV. Las calles de Priene tienen la particularidad de que son todas horizontales y verticales, paralelas y perpendiculares, como un tablero de ajedrez. Sin embargo, los zapatos cómodos son imprescindibles, especialmente para aquellos que desean llegar a la cima donde alguna vez estuvo la Acrópolis. Ahora solo quedan ruinas, pero la vista es espectacular y vale la pena el esfuerzo. Por otro lado, el Teatro aún se encuentra en buen estado aunque parcialmente sumergido en árboles y vegetación. El teatro era originalmente griego y construido en el siglo IV a.C. pero fue reformado por los romanos en el siglo II d.C. y su capacidad de asientos aumentó hasta seis mil espectadores. La pared del escenario que tiene dos pisos, se enfrenta a una fila de cinco asientos de mármol a modo de tronos que descansan sobre pedestales en forma de pies de león rodeados de hojas de hiedra. Quizás el teatro también se utilizó para debates y reuniones políticas. En el centro hubo una vez una estatua de Atenea de siete metros de altura que rivalizaba en tamaño con la famosa estatua de Fidias en el Partenón de Atenas. Junto al templo se pueden ver las ruinas de casas pertenecientes a ciudadanos ricos o importantes dignatarios. Tenían numerosas habitaciones que daban a patios interiores. El estadio data del siglo II a.C. y tiene ciento noventa metros de largo. En un tiempo hubo un pórtico de columnas dóricas. Bajo esta logia, los atletas podían entrenar cuando llovía, pero también se usaba como lugar de reunión para la población general de Priene.