Esta zona estuvo habitada por el hombre desde el Paleolítico. Se sabe que en la época romana se crearon importantes factorías de salazón y que durante el período musulmán a la actividad pesquera, en concreto a la almadraba, se le unió la explotación agrícola de las tierras costeras. Sin embargo, con la reconquista esta situación de próspero desarrollo cambia. Las ciudades son abandonadas y el territorio se convierte en una zona desértica. El gran cambio se produce en el siglo XVIII cuando las tierras de La Azohía se reparten en 58 `suertes`. Después de la repartición, se trazan caminos y se establece el primer núcleo importante de población cuyas principales actividades económicas son la agricultura y la pesca. En la actualidad es un tranquilo lugar turístico.