La fiesta más representativa e interesante de Malta es, sin duda, el Carnaval de Malta. Desfiles y carrozas son una auténtica explosión de color y diversión (durante el carnaval, los establecimientos y oficinas permanecen abiertos). A este le sigue la Gran Regata en el Puerto de La Valeta, que conmemora el final del asedio de los turcos en el año de 1565. Numerosas embarcaciones de Dghajsas, similares a las de Venecia, se lanzan al mar, por lo que el espectáculo es de gran interés.
Las fiestas oficiales son: 1 de enero Año Nuevo, 10 de febrero Naufragio de San Pablo, 19 de marzo San José, 31 de marzo Día de la Libertad, Semana Santa, 1 de mayo Día del Trabajo, 7 de junio Fiesta del Sette Giugno, 29 de junio Fiesta de San Pedro y San Pablo, 15 de agosto Asunción de la Virgen, 21 de septiembre Día de la Independencia, 8 de diciembre Inmaculada Concepción, 13 de diciembre Día de la República, 25 de diciembre Navidad.
La Semana Santa en Malta es bastante solemne y tiene un carácter marcadamente religioso. Comienza una semana antes del Viernes Santo con la procesión de la estatua de Nuestra Señora de los Dolores. El Viernes Santo se llama en maltés “Il-Gimgha l-Kbira”, que es un día de luto y no se trabaja, con los cines y las discotecas cerradas. El Domingo de Pascua también hay procesiones. La comida tradicional en Pascua es la figolla, un pastel con almendras que, según la mitología, fue entregado como regalo a Astarté, la diosa de la fertilidad. Las festividades duran hasta el miércoles siguiente al Domingo de Pascua, la Fiesta de San Gregorio, que conmemora el aniversario del fin de la peste bubónica que se llevó a más de diez mil malteses en el siglo XVII.