HISTORIA DE PALERMO
Palermo fue fundada a orillas del mar hace casi 3.000 años por los Fenicios. Fue base de los Cartagineses hasta su derrota ante los Romanos. En el año 831 Palermo cayó bajo la dominación de los Árabes. Éste fue el comienzo de una nueva vida para la ciudad, que al cabo de pocos años se transformó en una gran metrópolis.
En el año 1061 el ejército al mando del conde Roger y de Roberto Guiscard emprendió la campaña para la conquista de Sicilia. Once años más tarde entrarán en Palermo.
Bajo el mando de Roger II, Palermo -capital del recién nacido Reino Normando- alcanzó un inmenso esplendor. Era centro de relaciones comerciales entre Oriente y Occidente, y de todas partes llegaban nobles, comerciantes, aventureros, seducidos por el espejismo de la rica ciudad y su magnífica Corte. Se edificaron palacios e iglesias de estilo árabe-normando, que aún hoy constituyen uno de los principales atractivos de Palermo.
Toda esta grandeza continuó con Federico II de Suabia, que transformó su Corte en el mayor centro de la vida cultural de la época. Nunca más, el siglos siguientes, se alcanzó semejante magnificiencia, aunque durante la dominación española la ciudad se enriqueció con extraordinarios monumentos barrocos.
La ciudad vivió de nuevo un momento del pasado fulgor a principios del siglo XX, cuando Plaermo vivió su "Belle Epoque", gracias a la aserción de jóvenes familias de empresarios que dieron a la ciudad una ráfaga de modernidad, elevando además el nivel económico, cultural y artístico.