El Barrio del Castillo (Hradcany)
Delante de la puerta principal del Castillo se encuentra la Gran Plaza del Castillo, alzándose una columna de la peste de 1726 en su centro. En uno de sus laterales destaca el Palacio Arzobispal, cuya fachada fue obra del pintor y arquitecto Jean Baptiste Mathey en 1674. Siguiendo por un pasadizo lateral se alcanza el Palacio Sternberg (1707), que sirve actualmente como dependencia de la Galería Nacional; su horario de visita es de 10:00 a 18:00 h, cerrando los lunes. En su interior se muestra una exposición de pintura europea entre los siglos XIV y XIX, con obras de Durero, El Greco, Rubens, Bronzino, Goya, Brueghel… En el lateral sur de la Plaza se encuentra la fachada renacentista del Palacio Schwarzenberg, que fue Museo del Ejército hasta el 2002, año en que comenzó su restauración completa.
Estas fachadas siguen hacia el norte con el Palacio Martinitz, actualmente la oficina de los arquitectos municipales. Si se sube por la plaza se llega al barrio del Castillo propiamente dicho, con pequeñas calles que se mezclan con plazas y palacios de gran tamaño. La antigua casa de los canónigos da nombre a la calle Kanovnicka, donde también se alojaban los pajes del rey; en 1690 los dos edificios fueron anexionados por el monasterio de Loreto.
En tiempos de Juan de Luxemburgo y su hijo Carlos IV, se instalaron en esta zona ciertos del castillo y soldados, llamándose la zona “Nuevo Mundo” (Nový Svet). Contaba con ayuntamiento propio desde 1598, integrándose en Praga en 1784. En la época de la batalla del Monte Blanco se volvieron a construir todos los edificios del barrio, haciéndolos más grandes y pasando a manos de la nobleza que se había hecho rica en la guerra.
El Palacio Cernín:
Frente al monasterio se encuentra el Palacio Cernín, enorme edificio con 150 metros de fachada, sede del actual Ministerio de Asuntos Exteriores checo. Este edificio fue erigido por la familia Cernín de Chudenitz, que había amasado una fortuna durante la Guerra de los Treinta Años. La leyenda popular dice que los terrenos donde se alza estaban malditos desde siglos atrás. Sea como fuere, el caso es que muchos personajes que lo han habitado desde que se comenzaron las obras murieron. En 1851, aún sin concluir su construcción, el último Cernín lo vendió al ejército, convirtiéndose en cuartel. La entrada no está permitida a los turistas.
La Calle del Nuevo Mundo:
Estas calles alrededor del Castillo y de la Plaza tienen un aire casi de pueblo, pero con muchas tiendas, pudiendo encontrar anticuarios, restaurantes típicos o galerías de arte. En la Galería Gambra, los pintores Eva y Jan Svankmajer (marido y mujer) muestran desde 1992 obras surrealistas de distintos autores checos. Se puede visitar entre marzo y octubre, de martes a domingo entre las 12:00 y las 18:00h; de noviembre a febrero solo los fines de semana.
También en estas calles se encuentra la iglesia de San Juan Nepomuceno, obra de Kilian Ignaz Dientzenhofer, además de un convento de los carmelitas que se transformó en cuartel tras la desamortización de 1787. Las casas de esta zona eran normalmente sencillas, pero con alguna excepción, como la Casa de la Pera Dorada, con trabajos de estuco del siglo XVIII. El Zampach Palac está cerca, albergando actualmente la embajada austriaca; en los edificios de enfrente estaban las antiguas cárceles de la policía de seguridad comunista.