La construcción de este monasterio fue pagada por la duquesa Benigna Katharina de Lobkowitz entre 1626 y 1631. Se levantó sobre las casas de protestantes que habían huido tras la batalla del Monte Blanco. El edificio más antiguo es la Casa Blanca, que se sitúa en el centro del claustro, con un interior decorado al estilo barroco, diseñado por Kilian Ignaz Dientzenhofer, autor también de la capilla del Nacimiento de Cristo y la fachada del convento que se contempla actualmente.
El Tesoro de la iglesia, expuesto en la planta superior, está formado por piezas de todos los lugares de Bohemia, destacando entre ellos una custodia de 12 kg de peso y con más de seis mil diamantes incrustados. En las horas en punto el carillón del monasterio suena una melodía popular, siendo obra del relojero de Praga Peter Neumann.