En esta calle el principal monumento es la Iglesia de Santa María de la Victoria y el Niño Jesús de Praga (Chrám Panny Marie Vitezné). Se puede visitar todos los días entre las 8:00 y las 19:30 h. El museo sin embargo solo puede visitarse de lunes a sábados, de 9:30 a 17:30 h. Fue construida en 1612 como iglesia protestante, pero después de la batalla de Monte Blanco se convirtió en templo católico. Las obras las pagó un general valenciano llamado Baltasar de Marradas, caballero de la Orden de Malta, recibiendo entonces la imagen del Niño, hecha en cera. Apenas fue restaurada, los suecos saquearon en la Guerra de los Treinta Años. Cien años después el emperador José II secularizó las órdenes religiosas, expulsando por tanto a los carmelitas del país. Fue entonces cuando la iglesia pasó a estar bajo el control de la Orden de Malta.
Una vez se produjo la Revolución de Terciopelo, el arzobispo de Praga volvió a llamar a las monjas carmelitas y las visitas a la iglesia y al niño, así como las romerías, se han incrementado en los últimos años.
Petrín:
El monte Petrín se halla detrás del Malá Strana. En el pasado contaba con viñedos, pero hoy es un prado en el que encontramos árboles frutales y varios monumentos. Uno de los más interesantes es la estatua dedicada a Karel Hynek Mácha (1810-1836), poeta muy popular pero que murió muy joven.
Otra curiosidad es la Torre Panorámica, que abre todos los días en verano, de 10:00 a 19:00 h; en septiembre y octubre cierra una hora antes; y el resto del año cierra dos horas antes. Fue construida a imitación de la Torre Eiffel de París dos años después de la Exposición Universal de 1899. Tiene solo 60 metros de altura, pero desde lo alto se puede contemplar una buena vista de Praga y alrededores. Para subir hay que hacerlo por una escalera de 299 peldaños, sin ascensor.
La casa U Minuty se para las plazas Mayor y Pequeña de la Ciudad Vieja. En el centro de esta plaza se encuentra una fuente rodeada de una verja que se forjó en 1550. La Casa de las Tres Rosas Blancas, llamada U Rota, en honor al nombre del dueño, V. J. Rott, es una de las más curiosas de la plaza. En los sótanos de este edificio se imprimió la primera biblia de Praga en 1488. En la casa de al lado se ubicaba la primera farmacia de la ciudad, organizada por Angelo de Florencia, traído desde Italia por Carlos IV en 1353. Rodeando la plaza se encuentra la calle del Ayuntamiento, en la que encontramos la casa donde nació Kafka y la Casa de la Rana Verde (U Zelenê Záby).