Al caer la noche, el Safari Nocturno abre sus puertas, dándole la bienvenida al visitante que desee descubrir un mundo de criaturas nocturnas en medio de un ambiente de poca luz.
Inaugurado en 1994 y situado junto al zoológico de Singapur, el Safari nocturno es el primer parque de safaris para animales nocturnos del mundo. Pero se asemeja a un parque de vida silvestre más que un Safari real.
Sus ojos tomarán un poco de tiempo para adaptarse a la oscuridad del lugar, pero una vez que lo hagan, será recibido por más de 2.500 animales residentes de más de 130 especies – incluyendo muchos animales nativos de la región, como el elefante asiático en peligro de extinción, el tapir malayo y el tigre Malayo.
Los animales viven en 35 hectáreas de bosque lluvioso denso. Las criaturas más amistosas tales como ciervos vagan libremente en el parque mientras que los más feroces como leopardos están apartados detrás de unas barreras.
Para aquellos que prefieren explorar el parque sobre ruedas, un paseo en tranvía de 35 minutos con comentarios en vivo lo traslada a uno a través de siete zonas geográficas recreadas del mundo-desde las estribaciones rugosas del Himalaya a las orillas pantanosas de África Ecuatorial.
Una caminata por la jungla
El Safari nocturno en Singapur es el primer parque safari del mundo para animales nocturnos.
Explorar el parque en uno de los cuatro senderos permite ver aún más animales no visibles desde el tranvía. Entre ellos están una ruta que recrea una caminata nocturna a través de las selvas de Singapur, y el rastro popular del leopardo, que ofrece la colección más grande de la fauna natural del Sureste Asia.
También es posible pasear en (o correr desde) un amplio terreno en donde los zorros voladores malayos y las ardillas voladoras pueden deslizarse en el aire cerca, o caminar en el sendero de macrop para descubrir a este nativo australiano.
En caso de ser una persona acostumbrada a desvelarse, este es el lugar ideal para pasar la noche. Pero incluso para la gente que lo le gusta estar despierta de noche, esta es una experiencia que vale la pena estar despierto hasta muy tarde.