Shatt al-Jarid:
Shatt al-Jarid es un gran lago salado de origen endorreico el cual no tiene contacto con el mar u otra vía fluvial de manera sorprendente ocupa una gran parte del territorio de Túnez. Es uno de los múltiples lagos salados interiores que se encuentran situados en el norte de África.
El Shatt al-Jarid se encuentra a una altitud de entre 10 y 25 metros sobre el nivel del mar. Tiene una anchura de 20 kilómetros en su parte más estrecha y alcanza hasta 250 kilómetros de punta a punta. La tonalidad de la superficie varía con el tiempo entre blanco, verde claro y el púrpura.
El lago está cubierto de agua solamente en las áreas más bajas, excepto después de algunos períodos en los cuales ocurren fuertes lluvias. Junto con Shatt al-Jarid y Shatt al-Rharsa en Túnez y Shatt Melrhir y Merouane en Argelia, el lago forma una depresión que anteriormente era un brazo del mar y el cual se extiende casi 400 kilómetros hacia el oeste desde el golfo de Gabes.
Al sur de Shatt al-Jarid comienza el desierto del Gran Erg Oriental. Junto a los límites del lago que ahora son cruzados por una carretera que se ha convertido en una ruta para los turistas que visitan los oasis del desierto y las ciudades del interior. Se sitúan algunas localidades: las ciudades de Tozeur (capital de la Gobernación de Tozeur) y Nefta al norte; y en la orilla sur las ciudades de Kebili y Douz. , llegándose a destacar por su producción de palmeras datileras.
La mayor parte del año mientras este lago se encuentra seco, puede cruzarse caminando e incluso en coche, aunque esto último podría ser peligroso ya que en algunas ocasiones la superficie salina puede no llegar siempre estar del todo firme. Durante el invierno, cuando presenta una lámina de agua, se puede cruzar en pequeñas embarcaciones.
En las orillas del lago se pueden encontrar varias pilas de sal preparadas para su proceso industrial.
En la zona también es conocida debido a que aquí se rodaron algunas escenas de la película: Star Wars: Episodio IV - Una nueva esperanza.