Port Saplaya es una pequeña zona residencial costera de Alboraya, a 4 kilómetros de Valencia, conocida por sus hermosas playas y su inusual planificación urbana, que le dio su segundo nombre, como la Pequeña Venecia.
El club de navegación náutica local está ubicado en Saplaya, y esto no es casualidad, ya que desde el puerto hay una salida directa a mar abierto para los barcos. El puerto de yates se encuentra junto a las casas de la costa, lo que convierte a la ciudad en una pequeña Venecia.
El Club Náutico Port Saplaya está situado en Alboraia o Alboraya, una ciudad de la comunidad valenciana, muy cerca de la ciudad de Valencia. Este puerto deportivo tiene un aspecto individual debido a la colocación de sus amarres justo al lado de las puertas del edificio. Alboraya es conocida por sus grandes campos abiertos y su rica agricultura, pero también por sus obras de arte y su arquitectura. Los turistas observarán casas modernas que datan del siglo XIX mientras visitan los alrededores. Las excursiones marítimas, el piragüismo, el remo, el kayak y el windsurf son algunas de las actividades más populares dentro del puerto deportivo. También se puede admirar un rico patrimonio histórico y cultural al visitar el Punte del Moro, la Casa Conte Zanoguera, estructuras religiosas como la Parroquia de la Asunción de Nuestra Señora, la Ermita del Milagro de los peces y muchas más. Los viajeros pueden pasar un rato entretenido durante las fiestas españolas de la zona, como la Semana Santa, las Fiestas Patronales y otras.
La infraestructura urbana Port Saplaya es muy peculiar y muy original, lo que distingue notablemente esta zona de otras ciudades de España: el pueblo está formado por dos líneas de edificios que discurren a lo largo de la playa y forman un recodo del puerto situado en el mismo centro. Los principales lugares comerciales y de entretenimiento de Port Saplaya se encuentran en dos plazas principales a ambos lados del puerto, y a lo largo del paseo marítimo encontrará una gran cantidad de cafés y restaurantes para todos los gustos.
El pueblo fue construido en 1970 como destino de vacaciones para los vecinos de Valencia, donde los vecinos podían comprarse una segunda residencia de verano, en la que pasar fines de semana y vacaciones sin tener que salir de Valencia a muchos kilómetros. Sin embargo, a los valencianos les gustó tanto Saplaya que para muchos de ellos el apartamento de fin de semana se ha convertido en residencia permanente. En total, unos 2.000 habitantes viven en Saplaya, sin embargo, en los meses de verano el número de habitantes aumenta significativamente debido a la gran cantidad de turistas.
El pequeño puerto interior está destinado a embarcaciones pequeñas, que son principalmente propiedad de residentes locales. En todo su perímetro, está rodeado por una o dos hileras de coloridas casas multicolores, principalmente en tonos rojos y ocres, con un hermoso acabado blanco.