El complejo es un lugar realmente único y pintoresco. Se trata de un paraíso mágico acompañado de la música del mar. El edificio principal fue construido en el arrecife de un modo tan elegante que los huéspedes podrán disfrutar de su desayuno contemplando el arrecife. El complejo cuenta con un fuerte arrecife delante que lo resguarda, lo que marca la diferencia. Se recibe a los huéspedes en el vestíbulo y también hay bar, restaurante y servicio de habitaciones en el complejo.
El complejo se encuentra a 1 hora de Galle, a 1,5 horas de los preciosos parques de Bundala, Udawalawe y Yala, a 2 horas de la Reserva Forestal de Sinharaja y a 2,5 horas de Ratnapura (famosa por sus minas de piedras preciosas), además de poder hacer muchas otras excursiones. El complejo está situado a 210 km del aeropuerto internacional, que se encuentra en el sur. El aeropuerto de Bandaranaike es hoy en día el único aeropuerto internacional de Sri Lanka y se encuentra a aproximadamente 30 km al norte de Colombo.
El restaurante ofrece una gastronomía informal en un entorno típico de Sri Lanka con especialidades de este país y europeas, prestando una atención especial a la cocina italiana. A menudo hay bufets para desayuno, almuerzo y cena, aunque también hay la posibilidad de disfrutar de un menú a la carta o de opciones especiales entre las que se incluye un menú de marisco fresco. La pizzería abre para el almuerzo y sirve pizzas cocinadas en un tradicional horno de piedra italiano. En el chiringuito al lado de la piscina se pueden adquirir bebidas y aperitivos.