Este impresionante castillo, cuyas paredes encierran una gran historia, fue restaurado en el 2002 y se ha mantenido su antiguo carácter, además de mostrar una atmósfera inigualable. Tiene dos plantas y dispone de un total de 16 habitaciones, decoradas de manera individual, así como 3 suites. En el acogedor hall de entrada hay un área de recepción y una sala con chimenea. Parte de las instalaciones y prestaciones son, también, un restaurante a la carta, climatizado y especializado en platos tradicionales de la cocina escocesa de las Tierras Altas (con zona para no fumadores y sillas altas para los niños), así como modernas salas de conferencias y conexión a Internet. A su disposición tendrá el servicio de habitaciones del hotel. Podrá aparcar su coche en el aparcamiento del propio hotel.
El histórico castillo de Tulloch, del siglo XII, está en la localidad de Dingwall, que se caracteriza por sus tiendas llenas de historia y por sus museos en el tranquilo centro (a unos dos kilómetros). La ubicación algo elevada le permitirá disfrutar de unas maravillosas vistas de las Tierras Altas. Este hotel-castillo es un punto de partida ideal para realizar excursiones diarias a las Tierras Altas occidentales (por ejemplo, la preciosa Black Isle), a Iverness o al lago Ness (todas a 15 kilómetros), gracias a las rápidas carreteras de reciente construcción.
Se ofrece a los clientes desayuno. A la hora del almuerzo puede pedir un menú y a la hora de la cena puede pedir, además de un menú, a la carta. El cliente puede encargar comida dietética y platos especiales.