Este hotel fue construido hace más de 700 años y ha sido restaurado en el 2005. Aunque el hotel cuenta con unas instalaciones modernas, conserva el encanto histórico que le proporcionan las torretas originales, los claustros y entramados de madera. Tiene tres plantas en las que se reparten un total de 180 habitaciones, 1 de ellas suite junior y 3 habilitadas para minusválidos. En el hall de entrada, dotado de un antiguo mobiliario, hay un área de recepción donde se le ofrece la posibilidad de guardar sus objetos de valor en la caja fuerte. El edificio dispone de un elegante bar y de un restaurante climatizado. Aquellos que viajen por motivos de negocios o de trabajo tienen a su disposición una sala de conferencias. El servicio de habitaciones completa todas estas prestaciones. Podrá aparcar su vehí­culo en el aparcamiento del propio hotel. Es un vestíbulo pequeño pero con decoración bonita en la planta baja.

Este acogedor hotel está ubicado dentro de una preciosa finca ajardinada, cerca de la zona de páramos de Lancashire, y es un lugar de partida ideal para visitar el noroeste del paí­s. El centro de Accrington está a unos 3 km y puede llegar fácilmente con el servicio de transporte público o en 5 minutos en coche. Allí­ encontrará una gran cantidad de tiendas, comercios, bares, pubs y restaurantes. Si quiere realizar excursiones más largas, se le recomienda usar el tren. La estación de ferrocarril está a unos 4 km. También merece la pena hacer una excursión al parque temático de Camelot (a 30 km) o a la playa de Blackpool Pleasure (a 56 km). El tiempo de traslado hasta el aeropuerto de Manchester, situado a 45 km, es de una hora en coche.

Por las mañanas se ofrece a los huéspedes desayuno. Tanto al mediodí­a como a la hora de cenar puede elegir a la carta o pedir un menú. En el restaurante Cameo se le ofrecen especialidades culinarias y una carta de vinos internacionales, así­ como platos tí­picos de Lancashire.