Este encantador hotel está situado en el edificio Blarney Woollen Mills y cuenta con un total de 48 habitaciones. En el acogedor hall de entrada hay un ascensor y un área de recepción abierta las 24 horas del dí­a, que le ofrece una caja fuerte. Asimismo, también tiene a su disposición el servicio de cambio de divisa, una sala de conferencias y reuniones y varias tiendas. En cuanto al aspecto gastronómico, el hotel cuenta con un acogedor pub. En el que se podrá tomar una cerveza negra mientras disfruta de un ambiente muy agradable. Asimismo, el hotel aloja un restaurante bufet y un restaurante de asados, en los que se sirven diferentes tipos de salmón, así­ como potaje irlandés con carne de vaca o un delicioso filete. Otras prestaciones adicionales son el servicio de habitaciones y de lavanderí­a. A disposición de los huéspedes hay plazas de aparcamiento. El vestíbulo es espacioso, y como se puede esperar de un enclave tradicional molinero, con una amplia zona de descanso. Mantiene muchas de las características principales de la arquitectura de los molinos.

El hotel se encuentra en una zona magní­fica, en el pintoresco centro de Blarney, una ciudad legendaria. El paisaje de los alrededores es precioso y le ofrece unas condiciones magní­ficas para que pase unas vacaciones tranquilas y relajadas. La ciudad de Cork se encuentra a 11 kilómetros y el tiempo de transferencia al aeropuerto es de 45 kilómetros. También en muy poco tiempo podrá llegar al famoso castillo de Blarney. La pequeña ciudad cuenta con una interesante oferta cultural. Los huéspedes podrán disfrutar de numerosos restaurantes y pubs.

El restaurante Mill está entre el hotel y la tienda Woollen Mill, tiene una decoración de almacén tradicional. Es grande, espacioso y sirve comidas caseras.