Este encantador destino ofrece la mezcla perfecta de belleza atemporal y vida costera relajada. Los huéspedes pueden disfrutar de la completa relajación en la piscina al aire libre o simplemente dejarse deleitar por un paseo por los jardines de elegante diseño y terrazas con paredes de piedra. Otra opción es pasar la noche en la terraza al lado de la piscina, con vistas a la preciosa bahía de Duboka e islas cercanas, o bien descansar frente a una de las chimeneas. Los huéspedes disfrutarán del aroma de los pinos, jazmín y lavanda, lo que crea un ambiente maravilloso en medio de los diseños elegantes del elegante chalé. También hay dos aparcamientos para los huéspedes que lleguen en coche.
Este hotel está situado al lado de la bahía de Duboka, en la isla de Brac, una de las ubicaciones más anheladas del Adriático. El pueblo pesquero de Milna está a un paso, a menos de 2 km, con tiendas locales, konobas, restaurantes y playas.