Uno se olvida rápidamente del bullicio de la medina al entrar a este riad, en el que reina la calma en un entorno decorado con estilo contemporáneo. Cuenta con seis dormitorios, sala de TV, comedor, un patio con muros por los que fluye el agua y que aportan frescura, así como una soleada terraza. Este hotel de diseño ha sido recientemente terminado. Se recibe a los huéspedes en el vestíbulo con servicio de recepción y salida 24 horas. Las instalaciones disponen de aire acondicionado, caja fuerte, conexión a Internet WiFi, servicio de habitaciones y de lavandería, aparcamiento, cafetería, bar y restaurante.
El riad se halla a unos 30 minutos de camino de la famosa plaza Djemaa el Fna, el museo de Marrakech y de la antigua madraza Ben Youssef. También queda a unos 15 minutos de camino de Guéliz, en la parte nueva de la ciudad. El aeropuerto de Menara está a unos 2 km del hotel.