Este histórico hotel, restaurado respetando la arquitectura y los materiales tradicionales, ofrece un alojamiento muy confortable. El hotel cuenta con 7 habitaciones y está dotado de un patio rodeado de galerías y arcos, así como de preciosas terrazas con vistas a la antigua mezquita de la Kutubia y la cordillera del Atlas, desde donde se pueden admirar magníficas puestas de sol con la mágica luz. El establecimiento dispone de vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas. Sus instalaciones también incluyen caja fuerte, servicio de cambio de divisas, sala de juegos y sala de TV. Además, en el recinto hay una cafetería y un restaurante. También se ofrece conexión a Internet WiFi (de pago), servicio de lavandería (de pago) y aparcamiento y garaje para los huéspedes que lleguen en coche. También se pueden alquilar bicicletas en el hotel.
El hotel está situado en el distrito de Bab Doukkala, a un paso del castillo de Pasha y de los zocos. Es la base ideal desde donde visitar los centros históricos de Marrakech y los distritos de Guéliz e Hivernage, donde se pueden encontrar numerosos restaurantes y tiendas. Además, queda a 10 minutos de la famosa plaza Djemaa el Fna. A unos 500 m hay una estación de autobuses y el aeropuerto de Marrakech-Menara dista aproximadamente 3 km del hotel.
El hotel ofrece a sus huéspedes la oportunidad de descubrir las delicias de la gastronomía marroquí con su chef, Fatna. A petición se sirven también almuerzo y cena.