Este hotel histórico, adecuado para familias, disfruta de una ubicación excelente frente al mar, en Oban, la localidad de la costa oeste más turí­stica de Escocia. El hotel fue restaurado recientemente para devolverle todo su esplendor victoriano y se caracteriza por sus techos altos, sus habitaciones espaciosas, su servicio gastronómico y la atención a los huéspedes. Sus 50 dormitorios, modernos y confortables, han sido recientemente reamueblados, pero conservan todaví­a sus caracterí­sticas victorianas, sus amplios ventanales y mucho espacio. También hay 2 bares disponibles, el Harbour Bar y el Harbour Lights Bar. Sus instalaciones incluyen un vestí­bulo con recepción 24 horas, ascensor, restaurante y salas de conferencias. Se ofrece también servicio de lavanderí­a.

Oban, tradicionalmente conocida como la entrada a las islas, ofrece un precioso panorama de montañas onduladas, lagos e islas. Es una zona perfecta si quiere visitar Lismore, Mull, Iona y la Gruta de Fingal en Staffa. La ciudad tiene unas noches muy animadas y el hotel está en un lugar perfecto para visitar la destilerí­a de whisky mundialmente famosa de Oban. El hotel se encuentra en el muelle norte de la isla, a solo unos minutos de la terminal de transbordadores y de las estaciones de tren y de autobús.