Con magníficas vistas, este tradicional hotel garantiza unas vacaciones relajantes y tranquilas en la isla de Panglao, en la provincia de Bohol. Gracias a su rica biodiversidad marina, es un paraíso para los submarinistas. Además, hay muchos otros tesoros naturales por descubrir, como las famosas Colinas de Chocolate (una formación geológica parecida al chocolate debido a su color marrón) o los tarseros filipinos (una de las especies de primates más pequeñas que existen). Al final del día, los huéspedes podrán relajarse y recuperar la energía en las asequibles habitaciones o suites. Todas las habitaciones están equipadas con aire acondicionado, TV por cable y un baño privado con bañera. La suite ejecutiva cuenta con espectaculares vistas sobre el mar y cuenta con una cocina pequeña. Los clientes alojados en este hotel también podrán disfrutar de la piscina al aire libre, la tienda de souvenirs y los bares y restaurantes disponibles.