Este exclusivo hotel cuenta con amplias vistas a las tranquilas aguas del Mediterráneo, al pintoresco castillo y al puerto de Pafos. Su idílica ubicación frente al mar, en la que fuera la bodega SODAP, lo convierten en un remanso de elegancia contemporánea que rejuvenece y despierta los sentidos. Las elegantes habitaciones nos invitan a disfrutar de las impresionantes vistas de la puesta de sol. El equipamiento cuidado al detalle, junto con el atractivo mobiliario y la iluminación, crea el ambiente ideal para que el huésped se sienta como en casa. Aquí, los huéspedes pueden disfrutar de una ubicación privilegiada en una animada zona que ofrece un amplia gama de servicios, puntos de interés y locales de ocio nocturno.