Se trata de un hotel de playa, decorado con un mobiliario tailandés y de teca. Consta de un total de 70 habitaciones y de una serie de comodidades que incluyen servicio de cambio de divisas, salón de peluquería y restaurante. Después de haberse alojado en este hotel, querrá volver de nuevo.
El hotel está situado a solo 50 m de la playa.
Hay numerosos restaurantes entre los que podrá escoger, cada una de ellos con un estilo y ambiente distintivos, así como con una amplia selección de cocina internacional. El atuendo del complejo siempre es apropiado y el ambiente para las comidas pretende ser acogedor y relajado.