El hotel fue construido en 2008 como proyecto arquitectónico que mezcla su propia paleta de colores con los tonos naturales. Cada objeto y cada detalle son un complemento del resto y con ello se consigue crear un ambiente de tranquilidad. Se trata de un lugar cautivador dominado por la calidez de sus gentes y por la belleza natural del entorno. Lo clásico se mezcla con lo moderno al ritmo de la ciudad más bella del norte de Argentina. El hotel, de 51 habitaciones, tiene aire acondicionado y dispone de vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas, caja fuerte, ascensor, cafetería, bar, restaurante, instalaciones para conferencias, conexión a Internet WiFi, servicio de habitaciones, de lavandería (de pago) y aparcamiento (de pago).
El hotel está situado en el centro histórico de la ciudad, frente a la Plaza Belgrano.
Se sirve desayuno continental de bufet, así como almuerzo y cena a la carta.