Aunque Budapest tiene un patrimonio histórico bastante rico, "técnicamente" es una ciudad bastante joven: los asentamientos de Pest, Buda y Óbuda, situados a ambas orillas del río Danubio, no se fusionaron en una gran ciudad hasta 1873. Sin embargo, la gente comenzó a habitar esta zona no más tarde del siglo I a.C. Las tribus húngaras llegaron por primera vez a estas tierras en el año 895 y, en particular, Buda se convirtió en el primer centro político de Hungría. A principios del siglo XIII la ciudad había crecido tanto que se dividió en Óbuda (Viejo Buda) y Buda (nuevos barrios).
Durante mucho tiempo, el Reino de Hungría estuvo bajo el control de las familias nobles checas, bávaras, austríacas y polacas. A mediados del siglo XVI los turcos estaban en el poder; más tarde, en 1686, los austriacos habían asumido la propiedad de estas tierras y las habían devuelto al Imperio de Hesburgers.
El 15 de marzo de 1867 se firmó un acuerdo que daba independencia a la parte húngara del Estado austríaco en lo que respecta a sus asuntos internos. Uno de los resultados más importantes de esta decisión histórica fue la confluencia de Buda, Óbuda y Pest en una unidad administrativa - la capital de la autonomía. Desde entonces, el rápido desarrollo de la ciudad había comenzado; a principios del siglo XX, su población total era de unas 730.000 personas. El 16 de noviembre de 1918 Hungría se declaró una república independiente y Budapest siguió funcionando como capital del estado.
Este antiguo castillo real no podía ser ignorado por los expertos de la UNESCO: en 1987 fue declarado Patrimonio de la Humanidad. Además, otros lugares de la capital húngara fueron inscritos en la lista de Sitios: toda la colina del castillo de Buda, la ribera del Danubio, la Avenida Andrássy, la Ópera del Estado húngaro, la Plaza de los Héroes e incluso el metro de Budapest.
Pero la lista de monumentos de Budapest es interminable. El Barrio del Castillo también alberga la Galería Nacional Húngara, el Museo Histórico de Budapest, la Iglesia de Matías, el Bastión del Pescador, el Laberinto, la columna de la Peste, la Casa de los Vinos Húngaros y el funicular que conduce a la colina de János. El edificio del Parlamento húngaro construido entre finales del siglo XIX y principios del XX es uno de los lugares más importantes de Budapest. Fue creado bajo la impresión de la Abadía de Westminster y los mejores ejemplos de la arquitectura de Bellas Artes de París.