Sennedjem vivió durante la Dinastía XIX, bajo el reinado del faraón Sethy I y los primeros años de Ramsés II. Probablemente llego a ser enterrado en la cámara de su tumba TT1 alrededor del año 11 del reinado de Ramsés.
Después de tres mil años de descanso pacífico, su entierro fue, por desgracia para él y su familia, descubierto el 2 de febrero de 1886.
Sin embargo su tumba llega a ser muy excepcional.
Curiosamente la tumba fue descubierta por el egiptólogo de origen catalán Eduard Toda, quien aquel tiempo era el vicecónsul de España en El Cairo, en compañía del egiptólogo francés Gaston Maspero. Un beduino de Qurna, llamado Salam Abu Duhi, acudió a estos dos egiptólogos que se encontraban en las cercanías de Luxor y les dio la noticia de que se había descubierto una necrópolis que no estaba excavada. Inmediatamente se pusieron a excavar para evitar que se produjeran varios saqueos.
En ese momento, Deir El-Medina presentaba un aspecto realmente deplorable. Sin embargo en la actualidad, la tumba de Sennedjem es hoy en día muy fácil de encontrar: está justo encima de la parada de descanso para los turistas (en la entrada, se pueden encontrar numerosas publicaciones eptológicas, especialmente las de los ifao, a precios muy interesantes). Está casi en el extremo sur de la colina.
La tumba de Sennedjem se puede considerar como un colectivo, porque al menos tres generaciones de la misma familia llegaron a ser enterrados en la misma cámara.