El palacio de Ciragan es un antiguo palacio otomano, el cual actualmente es un hotel de cinco estrellas. Se encuentra en plena orilla europea del Bósforo, entre Besiktas y Ortakoy. El antiguo palacio fue construido por el sultán Abdulaziz. El diseño del palacio fue realizado por el famoso arquitecto armenio Nigoğayos Balyan y construido por sus dos hijos entre 1863 y 1867. La madera fue utilizada en las paredes interiores y el techo del palacio, mientras que las paredes externas eran de mármol de colores. Hay un puente de mármol que conecta el palacio con el Palacio de Yildiz en la colina trasera. No fue hasta 1872 cuando la construcción y la decoración interior del palacio fueron totalmente terminadas. El Sultán Abdulaziz quien ordeno la construcción del edificio no vivió mucho tiempo en su magnífico palacio debido a falleció en el año de 1876 poco después de haber sido depuesto. Durante el reinado del sultán Mehmet V Reşat, cuando se estableció la segunda monarquía constitucional, al Parlamento se le permitía celebrar sus reuniones en el palacio. Sólo dos meses después, en enero de 1910, un repentino estallido de un incendio destruyó el palacio dejando sólo los muros exteriores en buen estado. Posteriormente, el lugar del palacio sirvió como un estadio de fútbol el cual fue llamado el estadio Şeref. Por último, en 1991, el palacio en ruinas fue restaurado de nuevo y un complejo hotelero fue construido en su jardín. Hoy en día, el edificio opera como un hotel el cual cuenta con suites de lujo junto a dos restaurantes abiertos para los huéspedes. La restauración del Palacio fue un poco polémica, ya que se llevó a cabo por una empresa independiente y no por el gobierno. El interior del edificio tenía unas luces muy brillantes de neón de color rosa. En el palacio figuran varias tiendas y zonas para eventos como banquetes lo que hace creer a muchos que el palacio en su diseño actual se asemeja a un centro comercial estadounidense. El interior fue decorado de nuevo con un ambiente mediterráneo, luminoso y colorido por el artista alemán Rainer Maria Latzke el cual además estaba equipado con una piscina interior con hermosos murales. En el primer trimestre de 2007, el palacio fue restaurado de nuevo y ahora tiene la apariencia a un auténtico palacio barroco con estilo y colores suaves.