Parque Natural de Guara

Se sitúa al noreste del la ciudad de Huesca. Su accidentada geografía surcada por ríos que forman profundos cañones la hace apropiada para la práctica de deportes de aventura. Su mayor elevación se alza a 2.077 metros de altitud sobre el nivel del mar. Esta zona ha sido protegida como Parque Natural y como zona de especial protección para las aves. El Parque comprende un territorio en el que se incluyen las sierras de Guara, Arangol, Gabardiella, Balces y Sevil, surcadas por los ríos Flumen, Guatizalema, Calcón, Formiga, Mascún, Isuala, Vero y Alcanadre. Las mayores alturas corresponden a la Sierra de Guara y son: el Tozal del Buitreo de Cubillas (1.945 metros), Cabeza de Guara (1.870 metros) y Tozal de Guara (2.077 metros). Las sierras están cubiertas, principalmente, de bosques de pino carrasco, aunque también aparecen ejemplares de enebro, sabina, coscoja, encina y boj. Tampoco hay que olvidar a los abetos, que abundan sobre todo en la vertiente norte del Parque. La fauna que alberga este espacio natural está representada por las aves. Algunas de las especies que anidan en estos parajes son: quebrantahuesos, buitre leonado, halcón peregrino, búho real y águila culebrera. También es el hábitat de numerosos mamíferos, entre los que destacan los jabalíes, el gato montés, la gineta y la nutria. Desde el Parque Natural de Guara se puede acceder a otros interesantes espacios naturales, como el embalse de Barasona, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido y a los Mayos de Riglos. El Paque Natural de Guara enmarca varios lugares de interés artístico como las ermitas de San Martín, San Cosme y la Virgen de Arraro. En la actualidad, la Sierra de Guara es uno de los destinos preferidos de los amantes de la práctica de deportes de riesgo, como el descenso de barrancos. Sin embargo, esta zona también permite la posibilidad de realizar agradables excursiones a pie.

Transportes: al Parque se puede llegar por la N-240 (entre Huesca y Barbastro).;