La influencia del valle del Indo es notoria en las manifestaciones artísticas paquistanís. Se utiliza el ladrillo y elaboran una cerámica pintada muy perfeccionada. La miniatura ocupa un lugar importante en el arte del país, por la influencia hindú. Las muestras son coloridas y costumbristas. Se utiliza aisladamente la hoja de palmera cuya elaboración se perfeccionó desde el siglo XIV gracias a la adopción de nuevas técnicas y materiales. La miniatura mogol es representativa de la cultura pakistaní y recoge ambientes del paisaje, la flora y la fauna de la región. La presencia británica también deja sentir sus huellas en las construcciones estilo victorianas. También se encuentran maravillas en sedas, joyas, alfombras, artículos de cuero y antigüedades que han sido tratados con técnicas transmitidas de padres a hijos por generaciones.