Al igual que en otras islas caribeñas, los indios arawak se reconocen como los primeros pobladores del territorio. Estos se instalaron aquí probablemente huyendo de los caribes quienes controlaron el resto de la zona por más de 800 años. Los datos históricos aseguran que la isla se comenzó a llamar Santa Lucía a partir del siglo VI, pero no se sabe a ciencia cierta quién ni cómo se le dio el nombre. También existen divergencias en cuanto al arribo de Colón en 1502. Lo que sí queda claro es que fue Francois de Clerc, conocido como “Pierna de Madera” quien estableció su base pirata en Pigeon para atacar a los barcos españoles que circulaban por las cercanías. Posteriormente los holandeses establecieron una base en Vieux Fort en el año 1600.
La Presencia Francesa en Santa Lucía Más adelante, los franceses escogieron Soufrière como el lugar para su primer asentamiento y hacia 1746 ya contaban con 12 asentamientos. Con ellos llegaron las plantaciones de azúcar y los esclavos negros provenientes de Africa como trabajadores de la industria. Con la abolición de la esclavitud en 1838, las plantaciones comenzaron a decrecer y desaparecieron definitivamente en los años sesenta.
Santa Lucía bajo el Dominio Inglés El dominio inglés se introdujo en la zona en el año 1827 con la ola de transacciones comerciales. Así Santa Lucía entró a formar parte de una confederación de islas de Barlovento con base en Barbados y el inglés se instauró como idioma oficial en 1842. Hacia 1863 se comenzó la explotación del carbón que desarrolló con gran importancia hasta 1906 cuando la isla fue abandonada como base naval.
La Independencia de Santa Lucía En 1958 Santa Lucía forma parte de la Federación de las Indias Occidentales cuya vida institucional dura sólo 4 años; posteriormente obtiene una nueva constitución y su autonomía en 1967.
Es el 22 de febrero de 1979 cuando se convierte en un estado independiente dentro de la Commonwealth Británica con un gobernador general residente en la isla y nombrado por la Reina.