La tranquila población de Tábor en el Sur de Bohemia fue un importante bastión durante la reforma de la Iglesia Católica en el siglo XIV. Sitio desde el que los husitas (seguidores de las doctrinas religiosas de Juan de Hus) defendieron sus ideas a ultranza. Sus características geográficas, en la ladera de un monte boscoso, constituyeron una defensa natural en la que se construyó una muralla.
Ju ... La tranquila población de Tábor en el Sur de Bohemia fue un importante bastión durante la reforma de la Iglesia Católica en el siglo XIV. Sitio desde el que los husitas (seguidores de las doctrinas religiosas de Juan de Hus) defendieron sus ideas a ultranza. Sus características geográficas, en la ladera de un monte boscoso, constituyeron una defensa natural en la que se construyó una muralla.
Juan Hus criticó duramente la avaricia del clero católico, propugnando una reforma a fondo de la iglesia desde un "extraño" nacionalismo checo. Movilizó masas lo que provocó su excomulgación y, posteriormente su muerte en la hoguera. Su martirio dio origen a una lucha armada conocida como las "Guerras Husitas" bajo el mando de Juan Zizka. La derrota de los husitas en la célebre Batalla de de Lipany hizo posible el regreso al trono checo de Segismundo. La paz en las zonas de Bohemia y Moravia llegaría con los compromisos alcanzados en el Concilio de Basilea.
De aquella época tan solo quedan algunos testigos, no así el espíritu reformador de la ciudad y que se respira, especialmente, en el ambiente alegre de sus calles.