Éste es uno de los hoteles más románticos de Asia, un lujoso complejo de encantadora arquitectura colonial que data de 1923 y que cuenta con un refinado servicio y con instalaciones de talla mundial. La elegancia de antaño se ha conservado con gran cuidado en este fascinante hotel de poca altura, que cuenta además con un topiario único en el que destacan las esculturas de elefantes finamente talladas, ardillas y pájaros, en un terreno de 16 hectáreas con playa. El vestíbulo al aire libre y la cafetería museo están diseñados para aprovechar la brisa del mar. Por otro lado, los altos techos, los muebles de época y los elegantes motivos decorativos crean en su combinación un hotel de lujo insuperable. En total hay 249 habitaciones y suites, y el hotel dispone de vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas, caja fuerte, servicio de cambio de divisas, peluquería, sala de juegos, parque infantil, club infantil, bar, pub, restaurante, instalaciones para conferencias, conexión a Internet WiFi, servicio de habitaciones y de lavandería, así como aparcamiento cercano. Además, en recepción se pueden alquilar bicicletas para ir de excursión por los alrededores.
Este hotel de playa está situado en el golfo de Siam, a unos 100 m de la playa de Hua Hin y muy cerca de las zonas de fiesta (a 300 m), del transporte público y de las tiendas (a 500 m). Cerca podrá visitar también lugares de interés como el mercado nocturno de Hua Hin, situado a 500 m aproximadamente, y el palacio Klai Kangwon, que queda a unos 5 km del establecimiento. La estación de ferrocarril de Hua Hin queda a unos 15 minutos a pie.
Podrá escoger a su gusto entre la selección de exquisitas opciones culinarias y comer al aire libre en los mejores restaurantes de Hua Hin o comer marisco en el Palm Seafood Pavilion, visitar el Railway Brasserie o el restaurante japonés Hagi. Y para disfrutar del sabor local puede visitar el cercano restaurante Salathai en la zona de los chalés con piscina. El antiguo vestíbulo es ahora una cafetería-museo al aire libre en la que se pueden ver fotografías y objetos 'vintage', y que atrae a los grandes conocedores del buen té, café y pastas. Por la noche podrá relajarse en el Elephant Bar o disfrutar escuchando la música de un grupo internacional en el Satchmo Club.