El hotel dispone de unas instalaciones modernas, combinadas con la arquitectura característica del sur, que captura el antiguo espíritu y las encantadoras tradiciones. Es ideal para todos aquellos que busquen un lugar retirado. Dispone de aire acondicionado, servicio de cambio de divisa, restaurante con platos deliciosos y menús preparados diariamente por chefs, que combinan cocina oriental y occidental, un aparcamiento, servicio de habitaciones y de lavandería.
Rodeado de una frondosa selva tropical, este retirado paraíso se encuentra junto a una playa privada. Está situado en una zona ideal, al lado de la famosa e histórica ruta comercial surasiática, que unía a las culturas occidentales y orientales. Llegará al aeropuerto de Phuket en 50 minutos por una pintoresca carretera.