En verano de 2001 el hotel, de estilo balinés contemporáneo, abrió sus puertas. Cuenta con un impresionante recibidor al aire libre, donde se encuentra la recepción, abierta las 24 horas. En cuanto al aspecto gastronómico, dispone de varios restaurantes, en los que se sirven platos asiáticos e internacionales. El bar y la cafetería son ideales para tomar algún aperitivo o un cóctel. El complejo también alberga una biblioteca, conexión a Internet gratuita y diversas tiendas y boutiques pequeñas. Aquellos que viajen por motivos de trabajo tienen a su disposición el centro de negocios y salas para celebrar conferencias o reuniones. El servicio de alquiler de bicicletas, de lavandería y de habitaciones completan todas estas prestaciones. El vestíbulo es bonito y de tamaño mediano. El vestíbulo es de plano abierto, tiene un techo tradicional de paja y madera.
Este amplio hotel se encuentra en una zona retirada, cerca del pueblo de artesanos y artistas de Ubud, en las orillas del río Petanu. Está rodeado de frondosa vegetación y le ofrece unas vistas espectaculares de los valles verdes y de los tradicionales arrozales. Si tiene ganas de ir de compras o disfrutar de otros lugares de ocio, el autobús del hotel circula regularmente hasta el centro de Ubud, situado a 1,5 km. El tiempo de traslado hasta el aeropuerto de Ngurah Rai es de una hora y cuenta con buenas conexiones con la red aérea internacional.
Por las mañanas se le ofrece un abundante desayuno americano en forma de bufet. Se puede reservar en régimen de media pensión, con lo que los huéspedes pueden elegir su cena a la carta. Si reserva pensión completa podrá elegir tanto la cena como la comida a la carta.