Este hotel de tres plantas, construido en el año 1800, cuenta con un total de 60 habitaciones repartidas en tres plantas, nueve de ellas individuales y 51 dobles. Tiene un hall de entrada con un área de recepción abierta las 24 horas del día y un restaurante con tronas para los niños.
Este atractivo hotel urbano tiene un emplazamiento perfecto cerca del centro de la ciudad. A pocos pasos (unos 20 metros) podrá encontrar una gran cantidad de tiendas y comercios, así como numerosos restaurantes, diversos bares, pubs y servicio de transporte público. El maravilloso centro de Glasgow, que merece la pena visitar, está a unos cuatro kilómetros y se puede llegar a él fácilmente en coche. Allí encontrará un gran número de lugares de ocio, como teatros, cines, conciertos, galerías de arte y de arquitectura, sí como muchas otras opciones tanto o más interesantes.