Este hotel resulta impresionante principalmente por el lugar especial en el que se encuetra. Cuenta con un total de 618 habitaciones repartidas en dos edificios. Tiene un acogedor hall de entrada con ascensores y un área de recepción, abierta las 24 horas del dí­a, donde se ofrece servicio de caja fuerte y cambio de divisa. El hotel también cuenta con una tienda de recuerdos, un quiosco, servicio de alquiler de coches y una peluquerí­a. Aquellos que viajen por motivos de trabajo tienen a su disposición un centro de negocios con equipamiento muy moderno. Para cualquier tipo de celebración, el hotel dispone de salas para banquetes. Si quiere tomar un aperitivo, una bebida o comer, podrá hacerlo en los agradables bares, en la acogedora cafeterí­a o en el restaurante a la carta, muy bien decorado y con buenos precios. Los huéspedes también pueden utilizar la conexión inalámbrica a Internet y el servicio de habitaciones y de lavanderí­a. Para los más pequeños hay una zona de juego. También hay plazas de aparcamiento disponibles.

Este hotel está situado en el centro histórico de Québec, en una elevación con preciosas vistas a la Avenida St. Lorenz. Se trata de una parte del castillo Frontenac, lo más llamativo de la ciudad, construí­do en 1893. El casco antiguo (el Vieux-Québec) ofrece una vista de la muralla intacta y podrá llegar a él en pocos minutos andando. A poca distancia del edificio podrá encontrar una gran cantidad de tiendas, comercios y lugares de ocio y entretenimiento. Pero también tendrá cerca los alrededores de la ciudad y sus atracciones como las cataratas Montmorency.

Por las mañanas se ofrece a los huéspedes desayuno. Tendrá la posibilidad de servirse de un bufé tanto el desayuno, como la comida y la cena. Además, a la hora de comer y cenar se puede elegir a la carta o un menú. Pero también se ofrecen platos dietéticos o platos especiales. Al realizar su reserva, podrá hacerlo en régimen de media pensión o pensión completa.