Casa rural típica de la zonaconsta de dos alojamientos, totalmente independientes, y restaurada, con tejado de pizarra y paredes de piedra vista
situada en medio del pueblo de Durro, en un lugar tranquilo, con unas fantásticas vistas del entorno, de la iglesia románica de la Natividad y de la ermita de Sant Quirq, declaradas recientemente Patrimonio de la Humanidad.