los techos de madera ateados y las pequeñas proporciones propias de las humildes moradas de campo. En la decoracion se han mezclado inteligentemente los elementos antiguos con los más modernos; los rincones entrañables se repiten entre los sofás que rodean a la chimenea del salon o entre los cojines que nos dan reposo en las camas exquisitamente vestidas con rústicas traperas. Servicios:Radiadores
Situada en el pueblecito de Puntagorda de tradicion agrícola, situado en la vertiente norte de la Isla, envuelta por el verde paisaje y buscando el horizonte en el mar, se encuentra esta casa de campo. Entre huertas y jardines