Este establecimiento, que ofrece el confort y la hospitalidad de un hotel moderno en el ambiente fascinante y único de una antigua granja de la campiña romana, es la base ideal para sus vacaciones. La tranquilidad de sus alrededores lo convierte en un acogedor oasis de paz. Ostenta una posición privilegiada cerca del ruidoso centro de Roma y constituye un lugar ideal con un entorno agradable tanto para viajes de negocios como de placer.
Este hotel, inmerso en un gran bosque y cerca de la circunvalación de Roma, ofrece una ubicación tranquila desde la que es fácil llegar al ajetreo de la ciudad. Dista solo 20 minutos de la Plaza de San Pedro y del aeropuerto internacional Fiumicino.
El hotel le ofrece un entorno flexible y acogedor en el que probar desayunos tradicionales o continentales, piscolabis y aperitivos.