Al visitar Eslovenia, los viajeros quedan impresionados por su vibrante historia, su bella naturaleza y su rica cultura. Muchos de los castillos y museos del país hacen que los visitantes sientan que están viajando en el tiempo. La naturaleza prístina de Eslovenia está llena de montañas, ríos y cuevas para que los visitantes las descubran. En el centro de Eslovenia, uno puede darse cuenta que es una ciudad limpia y con una arquitectura con mucha influencia italiana. Liubliana debe parte de su belleza a una catástrofe: Un terremoto en 1895 redujo a ruinas barrios enteros. Pero esto sólo dio rienda suelta a visionarios como Jože Plečnik para construir obras maestras del Art Nouveau a partir de los escombros.

Liubliana fue designada en 2016 como la Capital Verde Europea, en una parte de Europa no siempre conocida por su respeto al medio ambiente. El centro de la ciudad está ahora casi libre de coches, el transporte público es de bajas emisiones y hay una nueva red de ciclismo. La zona cultural de Metelkova es sitio de reunión cultural. A continuación se muestran algunas de las actividades que se pueden realizar al visitar Eslovenia.

Explora el encantador centro de la ciudad:

El río Ljubljianica fluye a través de la vibrante y colorida ciudad vieja.

Pasear por Cankarjevo Nabrezje, la calle peatonal que bordea el río Ljubljianica. Los cafés se encuentran a lo largo y extenso de la calle, así que este es un buen lugar para comenzar el día con el desayuno o tomar un descanso para tomar un café.

Plaza Prešeren:

Justo al lado de Ljubljanica, la Plaza Prešeren es el lugar donde las personas se reúnen y disfrutan el tiempo juntos. Si hay un evento en Liubliana, es muy probable que ocurra en este espacio.

Con un trazo triangular aproximado, el cuadrado se encuentra en la convergencia de varias arterias principales, y adquirió su aspecto opulento actual tras el terremoto de 1895. Fue entonces cuando los salones reales sustituyeron a las casas medievales que habían estado aquí antes, uniéndose a la Iglesia Barroca de la Anunciación, que data de 1795. La plaza toma su nombre del poeta del siglo XIX France Prešeren, cuya obra "Zdravljica", "A Toast", se convirtió en el himno nacional de Eslovenia.

Su estatua se encuentra junto a la Farmacia Central, frente a la plaza de su amor no correspondido y musa Julija Primic.

Pasear por las calles peatonales del casco antiguo:

Una de las cosas más geniales de esta ciudad es que está llena de vida, todos los días. Hay restaurantes, cafés, boutiques únicas, tiendas de chocolate (yum), y puestos de artesanos en cada calle a la que se llega. Si sólo está aquí por un día o dos y le apetece tomárselo con calma, entonces esto es suficiente para que conozca esta bulliciosa ciudad.

Castillo de Liubliana:

El Castillo de Liubliana, situado en una colina sobre la ciudad desde hace unos 900 años, es la principal atracción de Liubliana. La Torre de la Perspectiva y las murallas del castillo ofrecen algunas de las vistas más bellas de la ciudad, mientras que el castillo alberga una exposición de museo sobre la historia eslovena, un museo de marionetas y una serie de salas históricas como la Capilla de San Jorge, la Prisión y una sala de presentación de vídeos llamada Castillo Virtual.

El Castillo de Liubliana, al que se puede acceder rápidamente en funicular, también ofrece espacio para exposiciones de arte, alberga un café, una discoteca y dos restaurantes (Strelec y Gostilna na Gradu), y sirve de escenario para eventos culturales, entretenimiento familiar, veladas de baile y proyecciones de películas al aire libre bajo el título de Film under the Stars en verano.

Puente del dragón:

El Puente del Dragón, se encuentra adornado con famosas estatuas de dragones, aparece en las imágenes más reconocibles de Liubliana, que llegan a adornar el puente de la ciudad.

Además de la atracción de los dragones, el puente es una creación única considerada una pieza extraordinaria del patrimonio técnico y un magnífico ejemplo de la arquitectura modernista, que floreció a principios del siglo XX. Construida entre 1900 y 1901, fue la primera estructura de hormigón armado de Liubliana y uno de los puentes más grandes de este tipo que se construyeron en Europa. Fue la primera estructura en Eslovenia que se pavimentó con asfalto.

La decoración original del puente también incluye las lámparas de parapeto, alimentadas por gas.

El Puente del Dragón reemplazó a un viejo puente de madera llamado Puente de los Carniceros, que había estado en su sitio desde 1819. Las autoridades municipales después decidieron hacer un diseño moderno y una estructura de hormigón armado, principalmente por razones económicas, ya que la construcción en hormigón armado era mucho menos costosa que la construcción en la entonces más común piedra.

Mercado Artesanal Sabatino:

Aunque Liubliana siempre está viva, los sábados traen una ventaja adicional a la ciudad con los mercados semanales de artesanos. Con productos extravagantes y divertidos de artistas locales siempre hay algo diferente para captar su mirada. Ya sea que usted sea un comprador o no, es una experiencia divertida ser parte de la moda del mercado local.

Museo de las Ilusiones:

Este es un gran lugar para llevar a los niños. En este pequeño museo, se puede formar parte de varias ilusiones ópticas. Es divertido, es interactivo y solo tomara un tiempo breve recorrerlo.

Disfrutar de la vista desde el rascacielos (Neboticnik):

Para disfrutar de una vista aérea de Liubliana, está a un paso de Neboticnik, un rascacielos con una terraza en la azotea que ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad. El acceso es gratuito si sólo desea apreciar la vista, pero también puede cenar en el restaurante.

Parque Tivoli:

El Parque Tivoli es el parque más grande y hermoso de Liubliana, que se extiende hasta el centro de la ciudad. Fue diseñado en 1813 por el ingeniero francés Jean Blanchard y creado uniendo los parques que habían rodeado las mansiones de Podturn y Cekin. El parque, con una superficie aproximada de cinco kilómetros cuadrados, está atravesado por tres grandes paseos bordeados de castaños de indias y ajardinados con parterres ornamentales, interesantes árboles y numerosas estatuas y fuentes. La zona del parque se integra en las laderas de la colina de Rožnik, a la que está conectada por varios senderos, entre ellos uno con varias estaciones de ejercicio a lo largo de su extensión.

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