El Seminario de Valencia o tambien conocido como el Colegio del Patriarca fue una de las instituciones educativas más famosas de su época. Fue fundado por el célebre Arzobispo y Virrey del Rey de España, Juan Ribera, y el edificio del propio Colegio del Patriarca fue construido en el siglo XVI.
Luego se convirtió en uno de los primeros edificios con manifestaciones pronunciadas de la arquitectura renacentista. La antigua pesadez y solidez de los edificios góticos fue reemplazada por la ligereza y aspiración de las líneas ascendentes. El conjunto arquitectónico se complementa con la Capilla de la Concepción, reconstruida en el mismo estilo que el edificio del Seminario, ambos edificios tienen muchos elementos decorativos, arcadas con columnas delgadas y amplios ventanales, una decoración calada de la torre y un terraza descubierta.
Contrariamente a lo esperado, el Museo del Seminario resultó estar dedicado no al cristianismo o al catolicismo, sino a las bellas artes de la España medieval, Italia y otros países europeos. El primer piso está completamente dedicado a los lienzos de los maestros de la "vieja escuela" como por ejemplo: Dirk Bouts, El Greco, Morales, Juan de Haunes, Ribalt y Rogier.
A diferencia de otros museos locales, que tienden a recolectar tesoros y obras de arte de maestros predominantemente españoles, el Seminario de Valencia es mucho más internacional. Aquí se muestran colecciones de tapices muy artísticos de Bruselas, que hablan con entusiasmo de pinturas de artistas italianos pertenecientes al Renacimiento. En una sala separada hay una exposición de tapices de Flandes. Para la mejor conservación de las obras de arte, se mantiene un régimen especial de temperatura, humedad e iluminación en el edificio del Seminario.