Las más elegantes tradiciones de la arquitectura tailandesa en combinación con unos modernos servicios europeos convierten a este hotel en el retiro perfecto. El establecimiento ofrece restaurante, bar de cócteles y servicio de habitaciones y de lavanderí­a, además de recepción 24 horas. El vestíbulo domina la vista de la cascada artificial y la belleza de la playa de arena blanca de Chaweng.

Este hotel está situado justo al lado de la playa más hermosa de Chaweng. Aquí­ podrá disfrutar de cascadas, corrientes, fuentes y estanques, además de playas de finas arenas blancas y vistas de las islas tropicales de los alrededores. Gracias a este paisaje de belleza natural, caracterizado por flores y árboles autóctonos y altí­simas palmeras de cocos, hasta el viajero más experimentado podrá gozar de una experiencia inolvidable. El hotel dista menos de 10 minutos del aeropuerto, si bien está completamente alejado del estrés y el ajetreo de la vida en la ciudad.